viernes, 22 de agosto de 2025

¿Es la doctrina cristiana un ejemplo ético a seguir?

Es habitual que los cristianos consideren la figura de Jesús como un ejemplo sobrehumano (nunca mejor dicho) de doctrina y comportamiento éticos. Por extensión, resultaría evidente, el seguidor de la religión cristiana, incluso aquellos de menor talante dogmático, tendría como modelo el mayor ejemplo moral y ético de la historia de la humanidad. ¿Es esto realmente así? Si demostráramos lo contrario, tal vez empezaría a tambalearse todo el edificio sobre el que se sostiene el cristianismo. Sí, algo ambicioso y poco modesto por nuestra parte, pero quién dijo miedo. Por supuesto, no entraremos, dentro de las siguientes reflexiones, en la historicidad de Jesús. Daremos por hecho que es posible que hubiese una figura con cierta similitud a lo que nos han contado habitualmente. No obstante, a pesar de esta notable suspensión de la incredulidad, hay que decir que resulta francamente difícil, a poco que uno indague, hacerse una idea sobre cuáles fueron exactamente los principios morales de aquel hombre. Es más, los primeros autores cristianos, como Pablo, no aluden a las enseñanzas éticas de Jesús tal y como se exponen en los evangelios. Hay buenas razones para suponer que lo que hoy conocemos como ética cristiana, son adiciones posteriores a la doctrina original. A pesar de ello, como la mayoría de los cristianos parece ignorar este problema, nosotros hoy también lo haremos para nuestra valoración.

domingo, 3 de agosto de 2025

Las afirmaciones negativas y la "carga de la prueba"

La llamada "carga de la prueba", expresada por medio de la sentencia latina affirmanti incumbit probatio, viene a significar que dentro de una discusión lógica corresponde siempre a quien afirma demostrar la existencia de lo afirmado. Es por eso que los ateos no deberíamos entrar en esa discusión irresoluble sobre la existencia, o no, de Dios (más adelante, veremos que simplemente no es una hipótesis científica ni puede deducirse de la razón).

Existen muchos argumentos para oponerse a la creencia sobrenatural, pero desde un punto de vista ontológico hay que decir que la evidencia nos demuestra que algo como Dios (o sobre cualquier ser que trascienda el mundo natural) es sencillamente una fantasía del ser humano (una fantasía que podemos demostrar posee muchas caras). Richard Dawkins recordó en la introducción de El espejismo de Dios una frase de Douglas Adams, escritor y guionista de los Monty Python, en su libro Guía del autoestopista galáctico: "¿Es que no hay suficiente con ver que un jardín es hermoso, sin tener también que creer que está habitado por hadas?". Cuando alguien afirma la existencia de algo excepcional, algo que resulta bastante sencillo y habitual, no puede ponerse al mismo nivel que los que negamos la afirmación debido a las evidencias en contra. Si queremos progresar en el conocimiento, es necesario probar las afirmaciones positivas que realizamos, o de lo contrario nos rendimos a esa poderosa herramienta creativa que es la imaginación. En conclusión, la carga de la prueba reposa sobre aquellos que realizan una afirmación fuera de lo común y, consecuentemente, deberán respaldarlas con argumentos convincentes.

jueves, 24 de julio de 2025

Curso acelerado de ateísmo

Con permiso de Antonio López Campillo y Juan Ignacio Ferreras, autores del libro con el mismo título, sintetizamos algunas ideas presentas en él con las que no podemos estar más de acuerdo.

Primera lección. La pregunta sobre si existe Dios, en el correr de la historia, supone la aparición del pensamiento crítico, la potenciación de la filosofía y de todas las ciencias. La respuesta del ateo no será un no tajante, ya que creer en no-creer invita a la reflexión, será un "no lo sé, pero creo que no". La reflexión consiste en considerar la imposibilidad de demostrar la inexistencia de algo; por el contrario, si algo puede ser demostrado que existe, la no existencia caería por su base. El gran problema para los creyentes es ese, la imposibilidad de demostrar la inexistencia, por lo que se han dedicado durante siglos a tratar de demostrar la existencia de dios. La propia existencia de tantas "pruebas" sobre la existencia de una divinidad supone, en verdad, que ninguna de las mismas ha sido definitiva. Esa falta de pruebas razonables dio lugar a que la cuestión perteneciera, para los deístas, al terreno de la fe y de la revelación. La revelación consiste,

sábado, 12 de julio de 2025

Anarquismo y religión: otra vuelta de tuerca

Hemos defenestrado, no pocas veces, desde este blog, la religión desde un punto de vista anarquista; no cabe ninguna duda que así se produce en el anarquismo moderno, aunque matizaremos más adelante. El pensamiento anarquista es eminentemente naturalista (un término que, tal vez, gustará más que "materialista" si lo utilizamos en un sentido amplio); es decir, se esfuerza en buscar causas naturales en los fenómenos, sin incidir en las fantasías religiosas, y en transformar la realidad social desarrollando en un plano terrenal la acción y el pensamiento humanos (en lugar de trasladarlos a un plano sobrenatural).

En origen, el anarquismo radicalizó la idea de que la religión hacía más soportable a las personas los males de este mundo vendiéndoles la idea de una realidad ultraterrena en forma de paraíso; Marx, lúcidamente, consideró que se trataba de un alivio para el sufrimiento de las personas, pero caben pocas dudas de que se trata también de algo que ha servido a los poderes instituidos para mantener dócil a los humildes. Aunque la realidad es ahora mucho más compleja que este análisis, la gran pregunta de cara a una transformación revolucionaria de la sociedad es si la actitud religiosa ayuda en ese sentido. Volvamos al anarquismo clásico. No cabe duda de que la visión ácrata dirige sus furibundos ataques, sobre todo, al teísmo; a un Dios personal, omnisciente y todopoderoso, creador y legislador de los asuntos humanos (es la línea seguida por Feuerbach y Bakunin, aunque está implícito el rechazo a toda visión sobrenatural). Una excepción a este antiteísmo anarquista la constituye otro autor prestigioso, León Tolstói, que trató de conciliar el cristianismo con las ideas libertarias; su visión anarquista sobre la propiedad y el Estado quieren verse, tal y como señaló Kropotkin en su conocida entrada de la Enciclopedia Británica, tanto en los dictados de la razón como en las enseñanzas de Cristo. Las ideas anarcocristianas tolstoianas, como hemos dicho, pueden verse como la excepción de un anarquismo fundamentalmente antiteísta; resulta lógico expresarlo así, ya que el anarquismo moderno nace en Occidente, por lo que su visión contraria a la religión se centra principalmente en el monoteísmo.

sábado, 21 de junio de 2025

Formas y tendencias del maldito papanatismo

Este término, que según la Rae se define como la "actitud que consiste en admirar algo o a alguien de manera excesiva, simple y poco crítica", nos parece clave para reflexionar un poquito sobre el librepensamiento (que, no nos dejaremos de repetir, viene a ser a una tendencia a tener un pensamiento independiente basado en un análisis crítico y racional).

Antes de profundizar en el papanatismo, disposición o actitud muy extendida, en opinión del que suscribe, dejemos algo bien claro. Todos, absolutamente todos, tendemos a admirar a alguna persona de forma evidente; particularmente, podemos mencionar muchos nombres de figuras intelectuales, siempre con preocupaciones éticas y políticas, a las cuales puede decirse que tomamos como referencia indiscutible (mejor expresado así, que meramente "admirar", término que parece conllevar cierta dosis de menoscabo propio). La cuestión es, clave para el asunto que nos ocupa, no perder nunca la perspectiva crítica; es una determinada actitud para la que hay que estar adiestrado, y que desgraciadamente tanto parece faltar.

sábado, 7 de junio de 2025

Maestros espirituales, gurús, charlatanes y otras gentes de mal vivir

Como vamos a empezar a soltar un poco de bilis, sin perder por supuesto el sentido del humor, y cualquier cretino puede poner una demanda con la más peregrina excusa, vamos a evitar en este capítulo mencionar nombres propios; el lector avispado reconocerá rápidamente a algún conocido escritor de obras con cierto éxito de ventas.

Directamente relacionado con el tema de la New Age, proliferan en la actualidad una serie de fulanos que insisten en la fuerza de la espiritualidad y en el poder de la mente y, especialmente irritante, es que lo hagan a veces con el subterfugio de cierta “base científica”. El intento de fusionar conocimiento científico con algunos elementos de exóticas religiones no es nuevo, se produce al menos desde la década de los 70 del siglo XX; es creíble que si se tiene suficiente imaginación, y verdaderas ganas de manipular, seguro que se encuentran algunos puntos en común entre, por ejemplo, la física cuántica y algunas corrientes místicas orientales. La cuestión es que el subterfugio “cuántico” se encuentra ahora muy presente en algo que es ya bastante antiguo; la idea de que la materia es una mera ilusión de la sique. Si vinculamos, como ya apuntamos en el apartado anterior de la New Age, misticismo con medicina, vemos la insistencia en el poder curativo de la mente; la manipulación espiritual de las personas está asegurada y también el enriquecimiento material de estos maestros de pacotilla. Uno de éstos conocidos gurús ha llegado a afirmar que su fuerza mental, a través de la meditación, llegó incluso a provocar en parte alguna catástrofe natural como un terremoto; que este tipo siga teniendo prestigio, y no se le denoste sin más, es un síntoma de los tiempos que vivimos.

viernes, 16 de mayo de 2025

La religión como principio en la historia de sumisión

Rudolf Rocker se atrevió a afirmar que existe una oposición interna entre religión y cultura; toda política tiene, en última instancia, su raíz en la concepción religiosa de los hombres, no se pueden vincular los factores político y económico, ya que éste último es de naturaleza cultural, íntimamente unido con todas las fuerzas creadoras de la vida social.

Existen puntos de contacto entre los fenómenos religiosos y los culturales, ya que ambos manan de la naturaleza humana, pero es necesario examinar más a fondo la relación existente entre ellos. Si religión y cultura arraigan ambas en el instinto de conservación del hombre, una vez que han cobrado vida toman caminos diferentes, al no existir entre ellas vínculos orgánicos, e incluso divergentes. No me gusta reducir el origen de la religión a la mera dominación, y el propio Rocker es cauto al respecto, y resulta practicamente imposible llegar al fondo de las concepciones religiosas mediante la especulación filosófica. Gracias a la ciencia, el hombre es más crítico a la hora de investigar el origen y desarrollo gradual de las religiones y tratar de comprender, así, los orígenes de la vida social y espiritual.